Nos prometimos tanto que como un cuento de hadas creímos siempre
encontrar un final feliz.
Mi orgullo y soberbia alguna vez pensaron que como yo nadie más
te amaría.
Y tenían razón, pero en el sentido literal de la oración.
Dios en su
infinita sabiduría nos creo diferentes para que cada uno amara a su manera,
en
diferentes colores, en diferentes intensidades, en diferentes posiciones.
¿Que si te ame?
Si.
te
ame hasta más no poder, te ame con celo, te ame con orgullo te ame con deseo.
Te
ame más que a mi propia vida, te ame sin peros sin excusas y sin miedo.
La mortalidad de la vida nos enseño a amar a otras personas,
con la misma o mayor intensidad, tal vez eres lo mas que he querido, tal vez eres
lo único que me ha querido.
Y sin saber con exactitud las respuestas
sé que soy feliz de solo saber que
aun respiras, que aun sientes, que aun
existes.
Sé que el mundo no se
detiene y que tu como yo en cada amanecer, en cada nuevo día.
Podemos empezar
de nuevo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario